domingo, 17 de abril de 2011

Domingo de Ramos


" Padre mío, si es posible que pase lejos de mí este caliz, pero no se haga mi voluntad, sino la tuya". Mateo 26, 39


El pueblo aclama con palmas y vítores a Jesús, como a un rey, entrando en Jerusalen. Es el mismo Jesús que poco después muere en la cruz.

El hombre no ha entendido la realeza del Señor.Y Jesús, por amor al hombre hace la voluntad del Padre.

Cuando un gran dolor nos lastima, y le preguntamos a Dios : por qué? El no nos da una respuesta intelectual, nos responde en forma existencial. Asumiendo Él mismo la muerte, y cuando se abraza a la cruz es para vencerla.

Este relato nos muestra el triunfo definitivo de la Gracia y de la Vida, y es el centro de la fe cristiana: cruz y resurrección. Cristo ha vencido a la muerte.

Señor, que en nuestros dolores, nos aferremos a Tí, y nos des tu fortaleza y amor!