domingo, 23 de abril de 2017

II Domingo de Pascua

"Ocho días más tarde, estaban de nuevo los discípulos reunidos, en la casa y estaba con ellos Tomás. Entonces apareció Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio de ellos y les dijo:¡La paz esté con ustedes! Luego dijo a Tomás: Trae aquí tu dedo: aquí están mis manos.Acerca tu mano, métela en mi costado. En adelante no seas incrédulo, sino hombre de fe. Tomás respondió: Señor mío y Dios mío! Jesús le dijo:"Ahora crees porque me has visto.¡Felices los que creen sin haber visto!"
                        Juan 20,26



Jesús resucitado, centro de nuestra fe, se aparece a los discípulos para que crean. Nosotros como Tomás, somos descreídos. Necesitamos ver y tocar, y Jesús nos pide que nos arrojemos a su amor sin red. Con total seguridad de que Él está hoy y siempre vivo para nosotros.
La fe en el resucitado crecerá, cada día más, a pesar de las dificultades y los dolores, si la pedimos con insistencia, porque no la tendremos por nuestros méritos, sino por gracia de Dios.
Hoy, también , la Iglesia celebra a la Sagrada Misericordia, a este Jesús resucitado que viene a nuestras miserias, con su corazón.



Señor: aumenta nuestra Fe!!!

-Facebook Agrupación de esposas cristianas.Argentina