domingo, 8 de octubre de 2017

" Escuchen otra parábola: Un hombre poseía una tierra y allí planto una viña, la cercó, cavó un lagar y construyó una torre de vigilancia.después la arrendó a unos viñadores y se fue al extranjero. Cuando llegó el tiempo de la vendimia, envió a sus servidores para percibir los frutos.Pero los viñadores se apoderaron de ellos, y a uno lo golpearon, a otro lo mataron y el tercero lo apedrearon.Finalmente envió a su propio hijo, pensando, respetarán a mi hijo.pero al verlo los viñadores se dijeron: éste es el heredero vamos a matarlo.
                                                           Mateo 21-33




Esta vida que Dios nos ha regalado es una viña, en la que nosotros debemos trabajar y dar frutos.
No siempre es entendido así, creemos que todo lo podemos hacer con nuestra libertad y sin consecuencias; olvidando que no basta con estar y pasar por esta vida, sino que debemos hacer una tarea fructífera.
Todo lo posible está en nuestras manos y lo imposible en manos de Dios.Cómo no trabajar en su viña? El sol, la lluvia, la vida y nuestro trabajo al servicio del Reino de Dios.
Qué frutos cosechará el Señor de mi corazón?
Justicia, misericordia, alegría fraternidad, perdón, paz y amor.







Virgen del Rosario, ruega por nosotros!


-Facebook Agrupación de esposas cristianas. Argentina