Juan 6 51,58
Juan nos sigue hablando del alimento y los judíos, desconcertados no entendían que comer el Cuerpo de Jesús y Beber su Sangre, implica dejarse transformar interiormente, y recibir sus sentimientos en nuestro corazón.
Cristo nos habita, nos da su vida, nos sabemos amados; es entonces cuando podemos modificar el mundo que nos rodea.
Virgen María, ruega para que me deje transformar internamente por Jesús!
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