domingo, 7 de agosto de 2011

19º domingo durante el año


Jesús les dijo: "Tranquilícense, soy yo, no teman".
Mateo 14,27
Qué parecidos a Pedro que somos! Ante las dificultades, los dolores, los miedos, nos hundimos en el mar encrespado de nuestra vida. Toda la seguridad del pescador avezado, se pierde en la tormenta! Igual que nos pasa cuando no reconocemos a Dios en nuestra vida. Claro que hay problemas, claro que no es fácil atravesarlos, que muchas veces nos sentimos hundir, y tenemos miedo. Y el miedo pesa, no nos deja avanzar. Es el momento de unirnos al Señor mediante la Oración.Esta unión es la que nos dará fortaleza y paz, para seguir adelante.
Señor: aumenta nuestra fe y llámanos a ir a Tí, confiados en que Tú, nos darás la mano y calmarás la tempestad!