Domingo XXIII del tiempo ordinario

"Entonces le presentaron a un sordomudo y le pidieron que les impusiera lasd manos. Jesús lo separó de la multitud y, llevándoselo aparte, le puso los dedos en las orejas y con su saliva le tocó la lengua. Después levantando los ojos al cielo, suspiró y le dijo: Efratá, que significa ábrete. Y enseguida se le abrieron los oídos, se le soltó la lengua y comenzó a hablar normalmente"

                                                                                                     Marcos 7, 32

Qué lindos son los Evangelio en los que Jesús hace milagros! Y los sigue haciendo hoy, aunque nosotros, distraídos, no los vemos. pero cada vez que actuamos escuchando o dando una palabra de amor, es Jesús que está obrando en el corazón. Estamos tan ocupados con nuestras  cosas que no vemos las necesidades del otro, de aquel cercano, familia, amigo, vecino, Hoy el mundo está conmovido por lo que sucede en Europa, tal vez no podamos hacer desde aqui nada concreto, pero sí, una oración, una plegaria, para que en los corazones de muchos que tienen responsabilidades, hoy, Jesús pueda obrar milagros!

Virgen María, ayuda a los refugiados del mundo!

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